Ya estamos en 2023 y este nuevo año ha traído consigo la actualización de las prestaciones en maquinaria para la hostelería. La innovación tecnológica no para y esto puede llegar a ser abrumador para algunos hosteleros que buscan tendencias para ofrecer el mejor servicio en sus negocios de restauración.
Desde QualityFry han compartido unas pautas que consideran que el hostelero debe tener en cuenta a la hora de comprar por primera vez o renovar la maquinaria de un establecimiento de hostelería, con el fin de lograr la máxima rentabilidad.
Los nuevos modelos de restauración deben apostar por los productos de QualityFry
Además, desde la compañía han querido resaltar que las freidoras son un elemento fundamental para la sostenibilidad a largo plazo en un negocio de restauración, un valor por el que cada vez abogan más empresas en el sector.
Es una realidad que los productos fritos son los más rentables en el sector horeca, ya que el margen existente entre el coste de la materia prima y el precio de venta de las raciones es bastante alto.
Además, es un producto que no demanda mucho tiempo de preparación en cocina.
Cada vez surgen más modelos de restauración innovadores, como bakery coffee, mercaurantes, restauración en estaciones de servicio, aeropuertos y restaurantes o bares sin salidas de humos.
Para todos ellos, contar con una freidora como las de QualityFry puede dar un giro de 360º a su modelo de negocio.
¿Qué debemos tener en cuenta para elegir la maquinaria del restaurante?
A continuación, el equipo de QualityFry nos da 5 claves para elegir la mejor maquinaria para tu negocio de hostelería.
1. Elegir equipos cerrados y automáticos
Para obtener un producto frito de alta calidad es fundamental mantener estable la temperatura del aceite durante el proceso de fritura.
Una freidora cerrada alcanza la temperatura ideal en menos tiempo, lo que ayuda a evitar las pérdidas de calor durante el proceso de fritura y reduce el tiempo que el alimento debe permanecer sumergido en el aceite.
Además, es esencial extraer el producto del aceite en el momento oportuno y esto sólo se puede conseguir mediante una freidora automática que controle los tiempos, una ventaja difícil de alcanzar con una freidora tradicional abierta.
2. Que realice una fritura sana y por inmersión
La fritura por inmersión es menos agresiva que otras técnicas culinarias, ya que logra mantener todo el valor nutritivo de los alimentos.
Los tiempos de cocina de una máquina que trabaja mediante fritura por inmersión son relativamente cortos, por lo que el contacto del alimento con el aceite es superficial y se produce una mínima absorción de aceite.
3. Que permita automatizar y estandarizar los procesos de fritura
Esta característica aporta un valor añadido en aquellos negocios con un gran volumen de comensales, establecimientos con cartas amplias y enseñas con varios locales.
En este sentido, los modelos iQ de QualityFry cuentan con un display táctil que permite programar los tiempos de fritura de los productos.
Para comenzar a freír, solo hay que seguir 3 sencillos pasos: colocar el producto en la tolva de entrada, elegir el tiempo para cada producto y recoger el producto listo para servir en la bandeja de salida.
Además, su sencillo y rápido manejo permite eliminar los errores de manipulación por el personal. Y, lo más importante es que permite estandarizar los procesos de cocina en todos los locales de la cadena. Así, cada servicio y cada producto tendrá el mismo estándar de calidad en todos los establecimientos.
4. Que sea eficiente y versátil
El gasto energético representa uno de los costes más significativos para los locales de restauración, y las freidoras para hostelería tienen un papel relevante en ello.
El mayor índice de consumo se encuentra en la energía que demandan los equipamientos de cocina, la climatización y la iluminación del local. Así, mejorar la eficiencia energética de la maquinaria de cocina se ha convertido en una necesidad que está generando grandes cambios en el sector.
Según la experiencia de la compañía, con sus equipos se logra reducir el coste eléctrico de operación en un 24% en comparación con una freidora abierta normal.
Su cámara de fritura cerrada y su sistema de filtros evita la emisión de humos durante el proceso de fritura, reduciendo al máximo la pérdida de calor y, por tanto, con un menor consumo de energía.
Además, sus freidoras permiten elaborar alimentos frescos o congelados, tanto dulces como salados, a la vez, en el mismo aceite y sin mezclar sus sabores u olores.
5. Una freidora segura y fácil de instalar
El proceso de fritura no tiene por qué ser peligroso o difícil. El equipo de cocina o sala no debería estar expuesto al contacto con el aceite de fritura o con superficies calientes.
Así, esta es una razón más para optar por una máquina cerrada y compacta, con control automático de los procesos. Y, sobre todo, fácil de instalar, los equipos QualityFry son monofásicos, solo necesitan una toma de corriente y están listos para funcionar.
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