Las cámaras frigoríficas en los supermercados son la herramienta imprescindible para un funcionamiento óptimo de la cadena de suministros en dichos establecimientos.
Hay que partir de la base de que son obligatorias para mantener la cadena del frio alimenticia y ofrecer el género con la mayor calidad posible. Es el punto intermedio entre el supermercado y el consumidor final, de ahí su importancia directa en la venta.
Además, el orden y la limpieza son también fundamentales para este tipo de establecimientos y eso solo lo garantiza un espacio en el que se pueda trabajar de manera cómoda y rápida.
Estanterías
Para mantener ese orden y limpieza son muy importantes las estanterías de almacenamiento, para que la reposición sea de manera matemática y no perder el tiempo en reordenar el almacén cada vez que haya que reponer algún producto.
En Impafri se posee todo lo necesario para poder cubrir las necesidades que el cliente pueda plantear con relación a este aspecto.
Con el nuevo sistema de unión «Clip art» de los paneles frigoríficos, la empresa que se encargue del montaje puede ahorrar un tiempo muy valioso que puede aprovecharse en otras cosas ya que es un sistema de montaje muy rápido y sencillo, evitando ganchos de material férrico y con ello posibles oxidaciones.
Puertas frigoríficas
Otro elemento a tener en cuenta es la nueva gama de puertas frigoríficas industriales con las que Impafri se ha situado como punta de la lanza en innovación, calidad y fiabilidad. Con un sistema de montaje muy rápido y sencillo, se convierten en la opción más practica para los montadores.
Seguridad
No debe olvidarse la seguridad como parte fundamental para quien adquiere las cámaras de Impafri. La compañía dispone en sus paneles de una clasificación de Bs2d0 de resistencia al fuego, algo muy a tener en cuenta ante la posibilidad de que ocurra cualquier incidente.
Como otro punto a resaltar, Impafri no deja de innovar tanto en su cadena de producción como en su infraestructura para hacerla más eficiente energéticamente. Esta conciencia la traslada a sus productos para que en la instalación se ahorre la mayor cantidad de energía posible. Por eso, sus paneles frigoríficos presumen de que su espuma de poliuretano es libre de CFC.
El inyectado que se les aplica es a alta presión con densidad de 43-45 kg/m³, lo que consigue que aíslen mas la temperatura que muchos otros del mercado y de esta forma se podrá mantener la temperatura exigida en la cámara con un menor gasto de energía del equipo frigorífico.