La comida entra por los ojos

La función estética de las vitrinas está clara, por lo que hoy día los proveedores están aumentando su oferta de manera que se pueden elegirlas prácticamente «a la carta»: con los colores corporativos de la marca, los materiales que más favorezcan, las formas que se integren perfectamente en el diseño de interiores de cada local… A la hora de destacar los productos, la iluminación LED es ya imprescindible como también lo son las formas curvas y la transparencia. El cliente debe ser capaz de ver cada ingrediente y tener una representación visual para tomar sus decisiones, lo que hace más fácil el proceso de decisión y anima a elegir productos nuevos que normalmente pasaría por alto.

Las vitrinas refrigeradas se usan para mantener los alimentos a temperaturas seguras, mientras que se muestran para su venta al por menor.

Las de frío estático conservan mejor los diferentes alimentos (no se resecan y mantienen su grado de humedad), sin embargo tienen una diferencia de 3º-5º entre la parte inferior y el estante superior.
Las de frío ventilado mantienen constante la temperatura en todo el volumen de la vitrina, pero tienen el inconveniente de resecar el producto y por ejemplo en casos como la carne le hace perder presencia y brillo además de perder parte de sus cualidades.

Vitrinas de barra

La normativa sanitaria española indica que todos los alimentos cocinados deben mantenerse libres de gérmenes patógenos hasta la hora de ser consumidos por los clientes, y esto solo puede hacerse de dos formas: «Calor o Frío». Para cumplir los requisitos de higiene y calidad y que además los productos estén expuestos al público, se utilizan las vitrinas de barra o vitrinas de tapas.
Las vitrinas que se colocan en la barra de un bar pueden clasificarse en:

• Vitrinas Neutras: Para bollería, churros y derivados, son productos que no se estropean a temperatura ambiente y la vitrina las protege de contaminación exterior.
• Vitrinas Calientes: Para mantener calientes alimentos cocinados por encima de 65º.
• Vitrinas frías: Las más habitualmente utilizadas para exponer tapas y raciones en las barras de los bares, suelen graduarse a una temperatura entre 2º a 8º (excepto las de sushi y pescado que van de –1º a 1º) se dividen en tres tipos:

– Vitrinas para platos: Para colocar en su interior platos, suelen estar abiertas por la parte trasera y transmiten el frío a los platos por contacto, el frío estático evita que se resequen las tapas y les da un aspecto mas atractivo.
– Vitrinas de bandejas: Similares a las anteriores incorporan bandejas de acero inoxidable en cuyo interior se colocan los diferentes tipos de raciones. Tienen más capacidad que la anterior al poder repartir mejor los productos, pero es menos estética (la colocación uniforme de los mismos).

– Vitrinas de Pescado o Sushi: Este tipo de vitrinas son especiales para la conservación de pescados y sushi, trabajan a un rango de temperatura mas bajo que las anteriores, de –1º a 1º, y tienen mucha más precisión en el control de la temperatura interior de la misma.